
Un vehículo destinado al transporte de pasajeros, concretamente una furgoneta, ha sido interceptada por agentes de la Policía Nacional a la altura de la salida Calahonda-Mijas, en la provincia de Málaga, transportando 27 fardos de hachís.
De esta manera, tras comprobarse el cargamento, los agentes han detenido al conductor como presunto autor de un delito de tráfico de drogas y han requisado los 928,8 kilogramos de hachís. Ya se encuentra en la cárcel por orden de la autoridad judicial.

Todo se inició tras detectar los agentes del grupo de Crimen Organizado de la Comisaría de Policía Nacional de Fuengirola una furgoneta en la autopista AP-46, en el Alto de la Pedrizas, que levantaron sus sospechas y decidieron poner en marcha la operación 'Twister'.
Vigilancia de la furgoneta
En este sentido, los investigadores apreciaron cómo el vehículo, destinado al transporte de personas, sólo era ocupado por un varón, si bien, la parte posterior del mismo se encontraba excesivamente hundido a juicio de los investigadores.
Así se puso en marcha una vigilancia discreta tras la furgoneta, la cual a la altura de la localidad de Fuengirola tomó un carril sentido Marbella (Málaga) y se desvió por la salida de Calahonda-Mijas, momento que aprovecharon los policías para interceptar el vehículo.
Tras identificarse ante el conductor le ordenaron que detuviera el motor del vehículo y descendiera del mismo, comprobando inicialmente por el olor y posteriormente por su localización que en la parte trasera de la furgoneta había un total de 27 fardos de hachís.
Es por ello que le detuvo como presunto autor de un delito de tráfico de estupefacientes. El pesaje total de los fardos arrojó un peso de 928,8 kilogramos de hachís. Tras ser puesto a disposición de la autoridad judicial, esta determinó su ingreso en prisión.