Málaga ha celebrado recientemente su tradicional Feria de Agosto un evento que, como suele ocurrir en estas concentraciones de muchas personas, se ha saldado con algunos episodios violentos e incluso el robo de móviles.
De esta manera, efectivos de la Policía Local de Málaga han detenido a cuatro jóvenes, uno de ellos menor de 15 años y el resto de entre 18 y 22 años, como presuntos autores de varios robos con violencia e intimidación perpetrados en las inmediaciones del recinto ferial Cortijo de Torres, concretamente en una zona ajardinada cercana al Palacio de Congresos.
Varias de las víctimas, todas ellas jóvenes, se acercaron a denunciar el pasado jueves los hechos a diferentes unidades de la Policía Local de Málaga que prestaban servicio en la Feria. Según ha podido saberse dos varones que lograron huir de los asaltantes. Uno de ellos tenía un pequeño corte en la muñeca derecha, donde, según denunció, uno de los individuos le había colocado una navaja.
La 'resaca' que deja la Feria de Málaga: Asaltos con navajas, agresiones y robo de móviles
Después de la descripción de los individuos aportada por víctimas y testigos, policías locales lograron localizarlos, huyendo a la carrera todos ellos. Así, fueron interceptados, en primera instancia, dos de ellos por policías locales que prestaban servicio de paisano y que fueron apoyados por compañeros uniformados.
Minutos más tarde, otra unidad de policías locales, que prestaban servicio en motocicleta, localizaron y dieron alcance a los otros dos implicados. En el cacheo preventivo de seguridad les intervinieron las dos navajas que presuntamente utilizaron para intimidar a las víctimas y robar.
Actuación de la Policía Local
Por otra parte, efectivos de la Policía Local de Málaga han recuperado un total de 12 teléfonos móviles que presuntamente habían sido sustraídos en el recinto ferial Cortijo de Torres,
El relato de los hechos nos lleva a la madrugada del sábado 19 de agosto. Las pesquisas policiales llevaron a los agentes hasta una zona ajardinada y oscura situada en la barriada Cortijo Alto, concretamente en calle Pierrot, donde localizaron un paquete cuadrado envuelto en papel de aluminio, junto a un rollo.
Los policías locales comprobaron que en su interior había un total de 12 teléfonos móviles con síntomas de sustracción cuyo valor de mercado era superior a 10.000 euros, siendo recuperados y entregados en dependencias policiales, donde quedaron a disposición de sus propietarios.
