Por todos es de sobra sabido, tanto por los propios vecinos como por los visitantes, que Málaga ofrece una amplia posibilidad de planes, monumentos que visitar y rincones que descubrir. Tanto es así que puede resultar muy complicado encontrar un momento del día en el que puedas aburrirte o pensar en lo que puedes hacer a continuación. Hay opciones para todos los gustos, tanto si quieres pasar un rato más relajado u optar por una actividad que requiera mayor movimiento y esfuerzo físico.
En estos términos, lo cierto es que existen algunos rincones con encanto que destacan sobre el resto, ya sea por la cantidad de visitantes que recibe a lo largo del año o por las buenas valoraciones que recibe de quienes los conocen. Un muy buen ejemplo de esto es El Caminito del Rey, una oportunidad única para incorporar algo más de actividad física a tu rutina diaria y, al mismo tiempo, descubrir impresionantes paisajes que hacen que Málaga sea un destino que todos quieren elegir para sus escapadas.
El Caminito del Rey de Málaga
En concreto, el punto de partida de este espectacular escenario se encuentra situado a casi 60 kilómetros de la capital malagueña, en el Puerto de las Atalayas. Aquí te encontrarás con el Centro de Recepción de Visitantes, pero no podrás comprar tus entradas en este punto, sino a través de su página web o en la taquilla del acceso norte.
El entorno del Caminito del Rey
Esta experiencia está en un entorno en el que, desde los siglos XIX y XX, se ubicaron un conjunto de infraestructuras ferroviarias e hidroeléctricas que le dan forma a las conexiones y la red viaria existente en el siglo XXI.
La Junta de Andalucía lo declaró como Paraje Natural en el año 1989 y presenta algunas zonas que vale la pena ver una vez en la vida. Algunas de ellas son la cueva de Ardales, la Necrópolis de Las Aguilillas o la Iglesia Rupestre de Bobastro.
¿Cómo es el recorrido del Caminito del Rey?
Si estás pensando en realizar esta actividad, entonces hay ciertos datos que, sin duda, te vendrá bien saber. Su recorrido es lineal, en sentido único y de manera descendente desde el norte hasta el sur. Tiene su inicio en el municipio malagueño de Ardales y se extiende hasta llegar al de Álora.
En total, el Caminito del Rey discurre a lo largo de una distancia de unos ocho kilómetros. Teniendo esto en cuenta, el tiempo que se estima para completarlo es de tres o cuatro horas, dependiendo de la velocidad a la que vayas y las pausas que hagas para descansar o para enamorarte de sus muchos y mágicos rincones.
El precio que tienen las entradas de esta experiencia es de 10 euros, en el caso de la general, o de 18 si prefieres optar por la visita guiada, en un grupo máximo de 30 personas acompañadas de un guía. Es una oportunidad única de conocer la esencia y el encanto de la provincia de Málaga.