Es común que Mala Rodríguez comparta con sus seguidores su día a día, mostrando su faceta más personal en sus redes sociales. Junto a las fotos que acostumbra a subir a Instagram, hay veces que publica algún que otro comentario sobre lo que está reflexionando o viviendo en ese momento. Lo que ha hecho sacar su lado más "hippie".
Estas últimas semanas, Mala Rodríguez ha estado en el punto de mira de muchos medios de comunicación debido a las confesiones que ha hecho públicas en su primer libro: 'Cómo ser Mala'.
Entre ellas, la artista se ha abierto al afirmar que vivió una relación tóxica de la que le costó trabajo recuperarse y salir, así como contó que un empresario de México le regaló un kilo de cocaína.
Tanto ha sido el éxito del libro, que salió a la vente el pasado 30 de junio por casi veinte euros, que la gaditana ha pensado en escribir una novela erótica ambientada en Sevilla, la ciudad que le vio crecer tanto profesional como personalmente.
"Me encantan las conversaciones que tengo con mi equipo, pero esta novela ocurre en Sevilla en la época de los romanos", advertía a su público respecto al futuro lanzamiento de lo que sería su segundo libro.
Mala Rodríguez pide "más comprensión"
Sin embargo, a pesar de todo lo que ha vivido Mala Rodríguez, según ha reconocido en su obra, la artista ahora intenta compaginar una vida con más calma y paz interior con su parte rebelde, revolucionaria y antisistema.
De este modo, también detalló que medita cada noche antes de dormir desde hace años, una práctica que sin duda te acerca más a la salud mental. Quizá es por ello que también la cantante deja entrever una parte más espiritual y tranquila de sí misma, tal y como ha reflejado en su última publicación.
"Más luz, más amor, más empatía, más comprensión", recitaba la rapera en su perfil público de Instagram junto a muchos emoticonos de arcoíris, donde acumula casi un millón y medio de seguidores, y con una foto disfrutando de un día en la piscina.
