jueves. 25.04.2024
Última hora niñas de Tenerife: Tomás Gimeno suicidio
Última hora niñas de Tenerife: Tomás Gimeno suicidio

El caso de las niñas de Tenerife, Anna y Olivia, su desaparición, la muerte de las niñas y el posterior hallazgo de los cuerpos ha consternado a España. Se trata de uno de los caso de violencia vicaria  a manos de Tomás Gimeno más mediáticos de nuestro país. Es por eso que cada paso se sigue con lupa pues el caso está lejos de resolverse todavía.

Tras este último hallazgo de botellas de oxígeno y cinturón de plomo encontrado por los equipos de búsqueda implicados, la hipótesis de que Tomás Gimeno, el padre de las niñas de Tenerife, se suicidó tras asesinar a las menores cobra aún más fuerza. No en vano siempre ha sido la hipótesis principal con la que ha trabajado la Guardia Civil.

El buque oceanográfico 'Ángeles Alvariño' encontró dos botellas de oxígeno que podrían ser clave en el desenlace del crimen de Anna y Olivia, las niñas desaparecidas en Tenerife el pasado 27 de abril después de que hace dos semanas se encontrase el cadáver de la mayor, Olivia, de 6 años.

El hallazgo es bastante importante. Las botellas, propiedad de Tomás Gimeno al igual que la otra bombona de oxígeno hallada a principios de mes, de 35 centímetros de longitud, un litro de capacidad y autonomía para de tres a 10 minutos podrían haber sido usadas por el padre de las menores para lastrar su propio cuerpo junto a un cinturón de plomo.

Las botellas de oxígeno son llamadas "biberones" por los expertos en submarinismo

"Son botellas muy pequeñas, no puedes bucear con ellas mucho tiempo, de hecho nosotros las llamamos 'biberones'", ha sentenciado para A3 José Martínez-Piñero, experto en submarinismo, en unas declaraciones recogidas por ELMIRA.es.

"Al lastrarte no tienes posibilidad de subir, no hay retorno; con la profundidad, Gimeno pudo haber sufrido una narcosis (alteración de la conciencia) antes de perder la vida", añade.

"Existe la posibilidad de que usase esas botellas para respirar hasta alcanzar cierta profundidad y, una vez ahí, sufrir una narcosis", tercia Germán Perera, otro experto en submarinismo, que señala que a la profundidad que fueron encontradas "solo se pudieron usar para ir en un sentido, no para volver".

Tomás Gimeno pudo utilizar dos botellas de oxígeno para suicidarse bajo el mar