viernes. 19.04.2024

A un hombre se le revienta la vejiga mientras duerme tras tomar cervezas

Pasó 18 horas aguantando sus necesidades fisiológicas

Se ha unido el calor con la alegría de poder salir a la calle. El calor ha entrado fuerte, tomando mando en plaza. Con una fuerza asfixiante. Y, para sofocar el calor, nada mejor que refrescar el gañote. ¿Cómo? Pues tomando algo bien fresquito.

Por ejemplo una cerveza. Con una es suficiente. No resulta necesario repetir. Ni menos aún abusar. Es cuanto le ha sucedido a Hu, un ciudadano chino de 40 años de edad. Amante, sí, de la cerveza. Hasta límites de asombro.

Hu, en una reciente noche de descontrol, se ha bebido 10 cervezas. De una vez. Una detrás de otra. Abusó, sí, del zumo de cebada. Una ingesta masiva que no supo controlar. Y que casi le cuesta la vida. Estuvo a punto de no contarlo.

Estaba disfrutando de tal manera, lo estaba pasando tan bien que, a pesar de sentir la extrema necesidad de excusarse, de ir al servicio, prefirió aguantar. Prefirió seguir de cañas con sus amigos. Era el modo de celebrar las salidas después del estricto confinamiento.

Una cerveza y otra y otra… Y risas, y más confidencias, y más risas… El servicio podía esperar. Siguió la ingesta y se olvidó de las vitales necesidades fisiológicas. La mente estaba en otra parte. La alegría en su cúspide. El descontrol absoluto.

Llegó su casa. Con el júbilo en la cabeza y el cansancio en el cuerpo. Así que, sin mediar apenas unos minutos, se durmió. Cayó de lleno. Cuando despertó no se sentía bien. Se notaba extraño. Con fuertes dolores abdominales.

De inmediato tuvo que ser ingresado en el Hospital Popular Zhuji en Zhejiang, al este de China, donde una tomografía computada reveló que su vejiga había reventado en tres partes. Los médicos calificaron las lesiones como peligrosas. Potencialmente. Tanto es así que incluso se temía por su vida.

Hu fue protagonista de un exigente maratón alcohólico: pasó 18 horas acumulando orina en el interior de la vejiga hasta que le acabó reventando. Estuvo a punto, sí, de morir. Después de ser operado de urgencia, los especialistas consiguieron salvarle la vida.

A un hombre se le revienta la vejiga mientras duerme tras tomar cervezas