viernes. 26.04.2024
Manguera de gasolina en una gasolinera - Freepik
Manguera de gasolina en una gasolinera - Freepik

La contaminación y el impacto que tiene el combustible en el medio ambiente están a la orden del día. Es una realidad que los gases que sueltan la mayoría de combustibles son nocivos para el planeta, pero en los últimos años, se le ha echado la culpa al diésel. Como consecuencia de esto, y de que la mayoría de personas no pueden permitirse coches eléctricos, se ha propiciado pues una creciente demanda de los coches de gasolina.

Las personas se han ido adquiriendo estos vehículos movidos por el pensamiento de que este tipo de combustible es menos contaminante que el diésel, ¿pero es cierto esto? ¿Qué combustible es el más limpio?

¿Qué combustible es más limpio?

La combustión es el proceso químico por el cual el combustible se oxida (reacciona con el oxígeno) gracias al salto de la chispa de la bujía o de la inyección de diésel a alta presión, dando como resultado la energía mecánica que mueve el motor así como ciertos productos que son expulsados al exterior en lo que conforma los gases de escape.

En el caso de una combustión ideal, es decir, cuando las cantidades de aire y de combustible son tales que reaccionan en su totalidad, los productos de esa combustión son vapor de agua (H2O), nitrógeno (N2) y dióxido de carbono (CO2).

Sin embargo, de estos tres gases, el nitrógeno es el único que no plantea ningún problema. Es un gas que no interviene en el proceso de combustión, y que su presencia se debe únicamente a que es el principal componente del aire que respiramos, y por tanto es absorbido por el motor.

Gases nocivos

En cuanto al vapor de agua, también es un gas de efecto invernadero. Sin embargo, su presencia es considerablemente menos dañina y preocupante que la del dióxido de carbono, porque la cantidad total de vapor de agua en nuestro planeta siempre se ha mantenido más o menos constante. Además, un exceso puede ser eliminado rápidamente por fuertes lluvias o nevadas.

Así, de los tres gases producidos por la combustión estequiométrica, el dióxido de carbono es el que resulta más nocivo para el medioambiente, ya que es uno de los denominados gases de efecto invernadero. A diferencia del vapor de agua, el CO2 es mucho más difícil de eliminar de la atmósfera y su presencia ha aumentado desde la revolución industrial.

Teniendo en cuenta estos detalles, hay que decir que el escape de CO2 de un motor de gasolina ronda el 14%, mientras que en un motor diésel el 12%. Esta variación se debe a la composición química del propio combustible, ya que el diésel tiene una mayor presencia de átomos de carbono que la gasolina. Por tanto, si a la mayor emisión de CO2 de una gasolina le sumamos que su consumo por kilómetro conducido también es mayor, se puede ver que el motor de gasolina contamina más en cuanto a emisiones de CO2.

Combustible de hidrógeno

Aunque sin lugar a dudas, el combustible más limpio es el hidrógeno. El combustible de hidrógeno es de emisión cero y utiliza celdas electroquímicas, o combustión en motores internos, para impulsar vehículos y dispositivos eléctricos. También se utiliza en la propulsión de naves espaciales y potencialmente puede producirse en masa y comercializarse para su uso en vehículos terrestres y aviones.

Este combustible puede proporcionar la fuerza motriz para automóviles, barcos y aviones, aplicaciones de pilas de combustible fijas o portátiles, que pueden alimentar un motor eléctrico. En cuanto a la seguridad en relación con explosiones accidentales, el combustible de hidrógeno utilizado en los vehículos de motor es igual de seguro como la gasolina.

Elemento

Además, como dato curioso, el hidrógeno se encuentra en el primer grupo de la tabla periódica, y también es el primer elemento de la tabla periódica. Esto lo convierte en el elemento más ligero del universo. De hecho, es el elemento más abundante, constituye casi las tres cuartas partes de la masa del universo. Se encuentra en el agua, que cubre el 70% de la superficie terrestre, y en toda la materia orgánica. Además, es el elemento más simple del universo, ya que está compuesto por un protón y un electrón.

También es 14 veces más ligero que el aire. Un «chorro» de hidrógeno gaseoso se difunde inmediatamente en el aire, sin contaminar el suelo o las aguas subterráneas. Asimismo, mirando otros aspectos es incoloro, inodoro e inofensivo; no produce lluvia ácida; no degrada el ozono; y, no produce emisiones nocivas.

El calor de combustión permite que el hidrógeno actúe como combustible. Sin embargo, como la electricidad, el hidrógeno es un portador de energía y no una fuente de energía. Las empresas energéticas primero deben producir gas hidrógeno, y esa producción sí tiene un impacto ambiental.

¿Cuál es el combustible más limpio para el medioambiente?