Para conmemorar el Día de San Valentín, que mejor hablar de lo que realmente es amor y no lo es, pues muchas veces nos engañamos a nosotros mismos y confundimos libertad con desamor, y control con pasión. Para ello vamos a hablar del inicio de este día y profundizaremos en los sentimientos.
El origen del Día de San Valentín o Día de los Enamorados se remonta a la antigua Roma, donde se celebraba la festividad de Lupercalia en febrero, en honor a la fertilidad y el amor.
Con la llegada del cristianismo, la festividad fue reemplazada por la celebración de San Valentín, un sacerdote que supuestamente casaba en secreto a parejas jóvenes a pesar de la prohibición del emperador Claudio II. A partir del siglo XIV, San Valentín comenzó a ser asociado con el amor romántico y la costumbre de intercambiar cartas y regalos en este día se popularizó en Europa y luego en otros países.
Hoy en día, el Día de San Valentín se celebra en muchos países del mundo como una ocasión para demostrar amor y afecto hacia la pareja, amigos y familiares. Hoy mismo, desde la propia Junta de Andalucía hacen hincapié en este día y en la concienciación sobre estos sentimientos.
🌐Hoy es el Día de los Enamorados
— Servicios Junta de Andalucía (@ServiciosAND) February 14, 2023
❤️¿Sabes lo que es el amor?
💔¿Y lo que no lo es?
❌Los celos, el control, la dependencia emocional, la violencia... eso NO es amor
Accede a los recursos en materia de #violencia e igualdad de género ➡️ https://t.co/lcNqEEUW6c#Andalucía pic.twitter.com/wF6uvAf028
El amor es un sentimiento complejo que puede ser definido de muchas maneras, pero generalmente se refiere a una emoción intensa de afecto, atracción y compromiso hacia una persona o cosa. El amor puede manifestarse de diferentes maneras, como en relaciones románticas, amistades, familia y también en la conexión con la naturaleza, la música, el arte y otras cosas que pueden generar un sentimiento de pasión y conexión emocional.
Sin embargo, a veces podemos confundir el amor con otras emociones o conductas que no son necesariamente amor. Por ejemplo, la obsesión, el apego, la dependencia emocional, la lujuria y la posesión pueden ser interpretados como amor, pero en realidad son formas distorsionadas de relacionarnos con los demás y con nosotros mismos.
Formas de amor distorsionadas
-
Obsesión: La obsesión puede ser interpretada como amor, pero en realidad es una forma de comportamiento ansioso y poco saludable. Las personas obsesionadas con alguien pueden sentir una gran necesidad de controlar la situación y a la persona, y suelen experimentar altibajos emocionales y cambios de humor extremos.
-
Apego: El apego emocional puede parecer amor, pero a menudo se basa en la necesidad de sentirse seguros y protegidos. Las personas que experimentan un apego poco saludable pueden sentir miedo a perder a su pareja, lo que les lleva a adoptar comportamientos posesivos y celosos.
-
Dependencia emocional: La dependencia emocional es una forma de conducta poco saludable en la que una persona depende de otra para sentirse bien consigo misma. Las personas que experimentan dependencia emocional pueden sentir una necesidad excesiva de aprobación y validación de su pareja, lo que puede llevar a una dinámica tóxica y desequilibrada en la relación.
-
Lujuria: La lujuria se refiere a una fuerte atracción sexual hacia alguien, pero no necesariamente implica amor. La lujuria puede ser una emoción fuerte e intensa, pero no siempre conduce a una relación amorosa y duradera.
-
Posesión: La posesión se refiere a un comportamiento en el que una persona se siente dueña o propietaria de otra. Este tipo de relación puede ser muy dañino y puede llevar a la manipulación y el control emocional.
En resumen, aunque estas emociones o comportamientos pueden parecer amor a simple vista, en realidad son formas distorsionadas de relacionarnos con los demás y con nosotros mismos, y pueden ser perjudiciales para nuestras relaciones. Es importante reconocer la diferencia entre el amor genuino y estas formas distorsionadas de afecto para poder construir relaciones saludables y satisfactorias.
