jueves. 18.04.2024

Un estudio afirma que el divorcio podría ser un factor de riesgo cardiovascular

Las personas divorciadas tienen un 42% más de riesgo de sufrir este tipo de enfermedades

Están, desafortunadamente, a la orden del día. Para mal o para bien, según se mire. Nos referimos a los divorcios. Crecen en cantidad numérica por año. De otro lado, también hemos de afirmar que existen estudios en apariencia creados para generar polémica. Y como muestra el botón del informe presentado por un equipo de la Keele University, en el Reino Unido, que sugiere que a las claras los médicos deberían tener en cuenta el estatus sentimental y marital de sus pacientes a la hora de estudiar su salud cardiovascular.

Parece lógico de entrada. Y es que los investigadores realizaron un pormenorizado estudio que reveló cómo las personas divorciadas tenían un 42% más de riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares que aquellas que seguían casadas. Y el riesgo también era mayor (aunque en puridad no tanto) en el caso de las personas solteras y viudas. Datos que añaden contenidos a nuestro conocimiento.

Tradicionalmente las enfermedades cardiovasculares han estado vinculadas a factores de riesgo como la tensión alta, niveles de colesterol elevados, y hábitos como el tabaquismo. Pero ahora no todo queda ahí. Porque a decir verdad los autores del estudio sugieren incluir el estatus marital como un factor más en dicha lista. La intención de los investigadores siempre es laudable y plausible. Aunque no obstante…

No obstante se trata de un estudio que puede malinterpretarse. O tergiversarse aposta. Por quienes condenan el divorcio o la soltería voluntaria y se aferran, empecindamente, erre que erre, a ciegas, al matrimonio como único modus vivendi. Matrimonio tradicional a la antigua usanza sin vuelta de hoja. Hay pensamientos únicos que no dan paso al progreso y a la idoneidad de cada pareja en un momento dado.

Con todo y con eso, tampoco es menos cierto que responde a la primera vez que “una investigación arroja resultados que reflejan loa beneficios de una vida en pareja dichosa”. Así, un estudio realizado en 2017 por la Carnegie Mellon University, reveló que las personas felizmente casadas tenían unos niveles de cortisol, la hormona del estrés, mucho más bajos que los de quienes estaban solteros. Revelación inapelable.

Un estudio afirma que el divorcio podría ser un factor de riesgo cardiovascular