Recientemente ha terminado el serial de cuatro celebraciones taurinas que han tenido lugar en la jerezana Bodeguita El Mentidero. Es una aportación más para que los aficionados mantengan el pulso vivo durante la invernada, para que ésta no se convierta en hibernación y la temporada se prolongue aunque de otra forma.
El año de la pandemia del coronavirus, ese 2020 que no ha existido en nuestras vidas, impidió, en este caso como en muchos otros, que se continuara con la tradicional convivencia de amigos en la entidad familiar de Montealto que se solía celebrar todos los años en la etapa final del año taurino.
Se trata de una reunión donde en cada ocasión un personaje comparte sus experiencias con una concurrencia de habituales, que giran alrededor de la cincuentena (de individuos, no de años), y donde tienen cabida todas las expresiones de la amplia variedad de la cultura taurina.
4 Sesiones
Tras el desierto pandémico, la Bodeguita quería desquitarse y se lanzó a organizar cuatro sesiones, con protagonistas de primera fila, en lugar de una, porque se habían ido acumulando las que estaban previstas y se han ido añadiendo otras que van siendo sugeridas por personalidades que, en vista del nivel que se va alcanzando, desean sumarse a este proyecto que se caracteriza por su toque entre íntimo y elevado. En esta ocasión la organización ha contado con la colaboración de la Fundación Cultura Taurina.
La primera de las convocatorias era la reparación de la imposibilidad que surgió el año pasado de hacer nada. En 2020 se cumplieron cien años de la muerte de Joselito el Gallo y un encuentro alrededor de su recuerdo hubo de ser postergado en espera de mejor momento. Ese momento tuvo que ser ahora, cuando las restricciones sanitarias dejaron paso, aunque sea moderadamente.
El ponente elegido ha sido don José Almenara, doctor en Medicina y Matemáticas y catedrático de Bioestadística. Se trata de una personalidad académica de altura y amplio reconocimiento, que además preside el Ateneo de Cádiz; investigador en lo suyo y buen aficionado taurino, su presencia ennoblece cualquier acto al que asista.
Doctor José Almenara
Almenara fue presentado por don Guillermo Boto, ginecólogo e investigador taurino, que realizó una semblanza desde el respeto profesional y sobre todo desde la amistad. La charla se tituló “Joselito en el recuerdo” y estuvo ilustrada profusamente con imágenes y vídeos. La tesis central era que Joselito es columna sobre la que se asienta el toro moderno al igual, exactamente igual, que lo hace sobre Juan Belmonte.
Además José es el precursor del toreo en redondo, como se pudo ver en unas imágenes de vídeo, sin olvidar el afán por lograr que los toros se convirtieran en espectáculo accesible para las clases populares mediante la construcción de plazas monumentales, que planificara las temporadas o que se cambiara el tipo de toro para el toreo por venir. Su influencia llega hasta nuestros días y el ejemplo más claro son las formas que Morante de la Puebla desarrolla en muchas tardes.
Jerezano
La segunda reunión tuvo como centro a Luis Parra Jerezano, matador de toros que es hoy el decano de los toreros de la provincia de Cádiz. En charla moderada por Marciano Breña Galán, cronista taurino de elMira.es, bajo el título de “Mis vivencias” fue desgranando recuerdos y apuntando detalles menos conocidos de algunos momentos de su trayectoria.
Incidió en lo temprano de su afición, en la brillante etapa novilleril (cuando llegó a ser líder del escalafón), en su agradecimiento a Paco Ortega como apoderado, en su relación con Antonio Ordóñez o en su tarde del victorino al que le cortó dos orejas en Madrid.
Luis Parra Jerezano y Marciano Breña
Especial interés despertó su apreciación sobre el comportamiento de los plumillas de la época, que escribían en función del sobre que recibían, ilustrándose con una crónica del diario Madrid. Jerezano contó, entre su audiencia, con personas como Álvaro Domecq, el maestro Pepe Osuna, Jesuli de Torrecera, Cristóbal Reyes o el artista Luis Gonzalo, que obsequió a los intervinientes con unas litografías de su autoría.
Álvaro Domecq
José Carlos Galán
La tercera velada fue protagonizada por José Carlos Galán Jiménez, arquitecto y profesor de arquitectura en la Universidad de Sevilla. Fue presentado por fray Felipe Ortuno Marchante, mercedario y comendador de la basílica de La Merced, que se refirió a la importancia de la tauromaquia en la cultura popular y su simbolismo, manifestado en múltiples detalles, que provienen de cuando se trataba de un rito religioso.
El ponente trajo el tema “Aspectos arquitectónicos de la plaza de toros de Jerez”, aprovechando que está terminando su tesis doctoral, que versa precisamente sobre el Coso de la Malata como ejemplo de la influencia de los cosos en el urbanismo. Se extendió sobre la figura de Juan Daura, arquitecto también de la plaza de Cádiz, así como sobre los antecedentes de la jerezana, antes de centrarse en el proceso de construcción y en el estilo de un edificio que pasó por diferentes etapas por culpa de los incendios. No olvidó presentar su modelo digital en tres dimensiones de la plaza que, con estilo neomudéjar, proyectó para Jerez Francisco Hernández-Rubio y que nunca se llevó a cabo.
Rafael Comino
La cita que ha cerrado este serial que comentamos ha servido para homenajear al matador portuense José Luis Galloso en el año en que celebran los cincuenta de su alternativa. Su “partenair” en la exposición ha sido don Rafael Comino Delgado, catedrático de Ginecología y presidente de la plaza de El Puerto, el cual es un buen aficionado taurino que tiene sección fija en la revista Aplausos.
Eligieron como tema de discusión “Reflexiones en torno a la suerte de matar”, aprovechando que el torero siempre destacó por la variedad en el uso de la espada y en especial por la recuperación del volapié. Se contó con la presencia en primera fila de los matadores Pepe Osuna, Luis Parra Jerezano y Francisco Ruiz Miguel, lo cual permitió un debate entre profesionales que resultó muy atractivo para los asistentes.
Destacamos la observación que el doctor Comino les hizo cuando afirmó, en contra del parecer habitual, que al sacar del toro la espada el aire no entra sino que sale de los pulmones a través del posible orificio provocado por una estocada defectuosa, lo cual acelera la muerte. Dos presidentes de plaza de Sevilla (Fernández Rey y Pepe Luque) también honraron con su presencia.
Tertulia con caldo en mano
Tras la conferencia de cada día los asistentes han podido prolongar la tertulia con una copa en la mano, acompañada de aperitivos, en un ambiente muy sugeridor al abrigo de los naranjos que adornan el jardín.
Las tres primeras veladas se desarrollaron al aire libre; la última, por amenaza de lluvia, fue en el interior de la bodeguita y tras ella se sirvió una cena fría, como fin de serial.
Se trata, en fin, de una gran labor y una consideración que debemos agradecer a los amables anfitriones, Jerónimo Cornejo y Mari Carmen Crespo, que abren su casa para sus amigos y para allegar un enriquecimiento más en el mantenimiento y divulgación de la cultura taurina, cultura de nuestra tierra y expresión de un pueblo.
