jueves. 25.04.2024

Tintin, el personaje del cómic europeo más famoso y popular cumple este 2019 90 años desde que fue publicado por primera por su creador, el belga George Remi más conocido popularmente como ‘Hergé’. Como no podía ser menos, el célebre e inquieto reportero del tupé y el perrito blanco Milú cuenta con miles de aficionados por todo el mundo y España no es una excepción.

Lo más parecido a un club de fans que hay en nuestro país es la Asociación Tintinófila ‘Mil Rayos’, la más importante de habla castellana y, casualidades de la vida, su presidente es el gaditano Nino Paredes, por tanto, todos los astros se han alineado para hablar de Tintin en su 90 aniversario en esta entrevista.

Lo primero de todo sería conocer qué es la Asociación Mil Rayos

Mil Rayos nació hace unos 14-15 años de la mano de un argentino que contactó conmigo porque yo era administrador de un foro de internet dedicado a Tintin con mucho movimiento. Le vi tan apasionado que me contagié y me uní a él en este proyecto.

Montamos el tinglado de un modo muy precario al principio. Realmente Mil Rayos como asociación con todos sus mimbres: dada de alta, con junta directiva y estatutos, lleva 11 años, pero el germen de lo que hoy ahí es aquello que se inició hace 14 años entre este argentino y yo.

Teníamos dos revistas al año no tan elaboradas como las de ahora y muy pocos socios, pero fue el inicio. Hoy Mil Rayos tiene algo más de 300 socios, en toda España, Portugal, América Latina, algunos por Europa Central –en su mayoría franceses y belgas que son socios por afición de todo lo que tenga que ver con Tintin- e incluso uno de China.

Y Nino Paredes, un gaditano, a su frente, ¿cómo se produce eso?

Soy el socio número uno. Empecé siendo vicepresidente porque el presidente era este chico argentino que lo inició. Cuando se inscribió en el Registro Oficial se creó la junta directiva organizada de forma democrática con elección a través de los socios.

Nunca me ha gustado estar en primera línea, pero hace unos años el presidente me dijo que me tocaba ponerme delante, lo relevé en el cargo y aquí estoy, pero el funcionamiento de la asociación es muy democrático, da igual los cargos, somos 10 personas y todo lo que hacemos se hace con una mayoría por voto. Ningún voto vale más que otro.

Mil Rayos es un punto de encuentro para los aficionados y la difusión de la obra de Hergé. A nivel socios tenemos un encuentro anual sobre febrero o marzo en la Fundación Carlos Amberes de Madrid donde siempre la asistencia de público es muy grande, unas 200 personas, a base de charlas, conferencias y exposiciones. Luego están las dos revistas impresas, una en verano y otra en Navidad y seis publicaciones digitales que se mandan a los socios. Todo este material es exclusivo para los socios porque son las condiciones que nos imponen los poseedores de los derechos. Tenemos un acuerdo con Moulinsart y entre los requerimientos que nos exigen es que el material que producimos sea de exclusivo uso para los socios.

Y justo en su presidencia se conmemora el 90 Aniversario de Tintin

Justo. Es un año que está siendo muy activo y no estoy acostumbrado a la primera línea. Estamos teniendo muchas actividades por todas partes: el 1 de febrero estaba en la Universidad de Lisboa dando una conferencia sobre Tintin, la misma que di en el encuentro nuestro. Una mesa redona en la Feria del Libro de Cádiz, charlas en varios colegios sobre el cómic, sus valores y Tintin. Es el año de Tintin.

¿Qué percepción se tiene de Tintin en la actualidad?

A todo el mundo le suena Tintin, pero creo que tiene muy poca difusión por parte de los poseedores de los derechos de Tintin. Tintin habría que introducirlo desde los colegios y hacerlo más cercano a las nuevas generaciones. A nivel coleccionismo hay un material muy bueno y de nivel muy alto, pero no es accesible para los jóvenes. Hay que alimentar las bases, abonar la cantera para que haya futuros lectores de Tintin.

Los superhéroes americanos y el Manga japonés han hecho que haya poca afición a la Línea Clara entre los jóvenes. Hace falta que los poseedores de los derechos hagan algo, un cómic más asequible para los chicos, para meterlos en el producto.

Ahora que los niños son nativos digitales, ¿es el momento de un formato digital accesible para ellos?

Por ejemplo. El caso es que Tintin hoy día está enfocado al coleccionismo y el coleccionista que nació en los 50-60-70 en 30 años deja de ser cliente. Hay que sembrar para garantizarse el futuro de la afición, no digo de usar y tirar, pero cómics baratos para los chavales. Pero bueno, son políticas de empresa no productivas a corto plazo, yo lo que propongo es a largo plazo.

Ha reunido una impresionante colección de libros y objetos sobre Tintin, ¿de qué se compone?

Empecé mi colección hace muchos años. Principalmente papel, libros y revistas. Con el tiempo fue adquiriendo figuras y reproducciones. La parte que de verdad amo es la de papel. Tengo unas 700-800 referencias de libros de Tintin, sobre Tintin y la obra de Hergé. De figuras será como la mitad de eso. Pero el papel es lo importante, la guardo muy cuidadosamente en un contenedor marítimo que dispuse en el jardín de mi cada para tenerla bien conservada en cajas de corcho y archivada de forma museística.

¿Cuándo se encuentran Tintin y Nino Paredes?

Siempre. Desde muy pequeño le leo, no coleccionaba. Me gustaban mucho los cómics, pues como lenguaje me llama mucho la atención, el Capitán Trueno, me he reído muchísimo con Astérix. Soy muy amante de la Línea Clara francobelga como dibujo limpio y que me transmite muchas sensaciones. Astérix y Obélix son muy divertidos pero no tienen el trasfondo de Tintin.

Conforme he ido leyendo Tintin con el paso de los años iba descubriendo cosas que nuevas que antes no advertía. Tintin tiene muchas lecturas en función de la madurez del lector. Conforme se madura se percibe diferente al personaje.

¿Con qué empezó su colección?

Con los cuatro o cinco ejemplares que conservaba de cuando era pequeño. La piedra inicial sobre la que empieza el resto. De hecho no me di cuenta de que estaba coleccionando hasta que no reuní cierto volumen. Ha sido una progresión muy estándar que se ha llevado a un extremo muy importante. Primeras ediciones, luego los de lomo de tela, los distintos idiomas que son ciento y pico… y toda una vorágine que vino después.

¿Qué es lo que más ilusión le ha hecho encontrar?

Los dos barcos que tengo, el Aurora de ‘La Estrella Misteriosa’ y el Sirius de ‘El Tesoro de Rakham El Rojo’. Son dos piezas muy especiales. No hay otra reproducción del Sirius como la mía. Me la fabricó un amigo belenista que trabaje muy fino. Conseguí desde UK una maqueta de un barco de las que hay que poner listón a listón y cuaderna a cuaderna. La morfología del casco de parecía mucho pero por arriba en nada, le di la maqueta y una viñeta, y le dije: haz lo que puedas. Y me ha construido la mejor maqueta que hay del Sirius. Si tuviera que coger una sola pieza de mi colección y salir corriendo, sería ese barco.

Lo que más trabajo le costó conseguir

Complicado. Alguna primera edición o idioma. Tengo algunos a los que le he puesto el cartel de imposible, bien porque está fuera de mi rango económico o es un incunable que a lo mejor circulan tres o cuatro unidades en el mercado desde hace años y siempre habrá un tipo con más dinero que yo que podrá comprarlo si es que salen a la venta.

¿Qué le falta?

Espacio –gesto curioso facial de Inmaculada, la esposa de Nino- (risas). He conseguido organizar muy bien la colección, las figuras y reproducciones en vitrinas en la casa y los libros en el contenedor. Conseguí unos manuscritos de la edición de El Medallón, unas ediciones previas que se hicieron previas a las que hizo Casterman en Francia y Bélgica para España. Es una página que sería el ‘making off’ de esos libros con la traducción y los transparentes. Es una pieza de museo, me da rubor que eso lo tenga yo en una colección privada y no esté en un museo.

Sobre su pregunta de qué me falta, pues uno de Los Medallones, pero es que cada uno cuesta entre 3.000 y 5.000 euros según su estado, con lo cual me olvido de ese material, pero se me cae la baba de pensar que pudiera tenerlo.

Hay muchas series clásicas de la BD francobelga que tienen continuidad: léase Spirou, Asterix, Blake y Mortimer o Lucky Luke. Tintin no, ¿le parece bien eso?

Lo primero, Tintin es Hergé. Él era muy celoso de su obra y no quería que Tintin continuase después de su muerte. A partir de ahí y respetando el criterio de la persona que lo creó y yéndonos a otros personajes, hay un producto que es el título original y otro diferente son las nuevas versiones. No me parece mal que ciertas obras de la BD tengan continuidad, pero yo no lo pongo al mismo nivel que las originales.

Es como la película de Spielberg. Una película estupenda desde el punto de vista técnico, pero no se puede comparar con el cómic. Como producto de cine es muy buena obra, pero incomparable a la obra de Hergé. No es criticable, es diferente, no se pueden comparar patatas con cebollas.

Hablando de Tintin y el mundo audiovisual, parece que es un personaje sin suerte en el este campo, ¿no le parece?

Las primeras películas que se hicieron de Tintin con personajes reales son curiosas, entrañables, pero como una antigüedad. No había medios para más. Son como las películas españolas antiguas, tienen su sabor. La de Spielberg nos ha demostrado que quizás no da para mucho más. Se suponía que iba a haber tres títulos, en cualquier momento dicen que podría llegar el segundo pero en EEUU el personaje de Tintin no es muy conocido y no ha tenido gran éxito.

El mundo audiovisual no es el universo de Tintin, Tintin es papel y es el que llega y triunfa, en el momento que pasa al mundo audiovisual ni tiene el mismo mensaje ni llega de la misma forma.

En pleno 90 Aniversario persiste el debate sobre la polémica de ‘Tintin en El Congo’, ¿Cuál es su visión al respecto?

‘Tintin en El Congo’ es el segundo cómic de Hergé, es un cómic de juventud. Es simpático e inocente. Me parece ridículo los que lo tildan de racista o introducen el maltrato animal. Es un chico de 20 y tantos desde la mentalidad de la Bélgica colonial que transmitió lo mismo que sus contemporáneos a su época. Si nos ponemos así, Robinson Crusoe es racista y si seguimos en ese nivel acabamos con nuestra tradición escrita, no se puede ser un talibán de las cosas.

Ha habido algunas corrientes que apuntan que sería interesante poner en la primera página ciertas advertencias sobre sus contenidos. No me parece mal del todo, pero prohibir y criticar una obra que en su momento era coherente con su tiempo me parece ridículo. El lobo de Caperucita se comió a la abuela y luego le abrieron la barriga… y no digo más.

Sus álbumes favoritos de Tintin según sus gustos personales…

Es muy difícil pero vamos a allá. Me gusta mucho el lenguaje de cámara de cine que tiene ‘La Estrella Misteriosa’. Tiene muchas escenas donde el hidroavión hace picados de cámara, angulos contrapicados, esa parte me parece apasionante porque utiliza un lenguaje cinematográfico de mucho movimiento siendo papel estático. Muy interesante.

‘Las Joyas de la Castafiore’. Es un álbum que se desarrolla por completo dentro de las paredes del Castillo de Moulinsart. Tenemos un Tintin que viaja por el mundo, que va de un extremo a otro del mundo, incluso llega a La Luna, y en ese álbum no sale del castillo. Y tiene una historia completa, para algunos la obra maestra de Hergé. Y es el único álbum donde no hay viaje. Es una contradicción apasionante.

‘Tintin en el Tibet’ tiene escenas espectaculares. Una vez que conoces la vida de Hergé sabes el por qué de todo lo que refleja cada álbum de Tintin. Cuándo se divorció, cuando tuvo una depresión… Muchos autores asocian a ‘Tintin en El Tibet’ porque Hergé estaba teniendo los llamados sueños blancos. Y es que ‘Tintin en El Tibet’ contiene muchísimas escenas con grandes superficies en blanco. Todo muy relacionado con la parte psico del autor.

¿Siente debilidad por algún personaje concreto del universo de Hergé?

Por el Capitán Haddock. No te voy a decir que Tintin me parece un niñito ñoño casi, pero Haddock me apasiona. Yo siempre con el Capitán Haddock y lo uso para todas mis representaciones.

¿Por qué se identifica con él? ¿el mundo del mar?

No sé, él muy explosivo y yo soy muy calmado. Y bueno, todos los que somos de Cádiz el mar tiene una vinculación con nosotros, llevamos la sal en las venas.

¿Qué nos puede decir de ‘El Arte Alfa’, el álbum inacabado?

A nivel dibujo me parece impecable y muy bien diseñada la versión de Yves Rodier. A nivel argumento prefiero como elemento romántico la versión inacabada de Hergé en boceto. Estoy convencido de que ninguna de las versiones que se han hecho, ya sean parodias u homenajes, no coinciden en argumento con lo que hubiera hecho Hergé de acuerdo a su trayectoria. El álbum de Yves Rodier es estupendo en dibujo y divertido y curioso en argumento, pero no tiene nada que ver con Hergé. La linealidad del argumento de los bocetos que tenía preparados me da la sensación que el desenlace hubiera sido diferente, mejor dejarlo en el aire.

Para terminar, nos gustaría que hiciera una recomendación a ese joven que quiere iniciarse en Tintin y el universo de Hergé

Me gusta todo de Tintin, pero entiendo que si un chaval coge por primera vez ‘Tintin en el País de los Soviets’ o ‘Tintin en El Congo’ le va a costar mucho engancharse. Esos títulos iniciales hay que leerlos después de devorar a Tintin y con el quiero más, porque en ese quiero más entran los títulos jóvenes, menos maduros en su dibujo y diseño. Cualquier álbum de la parte central tipo ‘La Oreja Rota’ o ‘La Estrella Misteriosa’ servirían para engancharse. De todos modos lo que importa al final de todo es leer. Leer es lo que le da a los chavales facilidad de palabra, que no cometan errores ortográfico, tener conversación. Y si lees Tintin, leerás más comics y leerás de todo. Leer es lo principal, si es un cómic bien, si no también. Lo importante es leer.

“A Tintin habría que introducirlo a las nuevas generaciones desde el colegio”