El maltrato animal no para de dejarnos episodios desagradables en los tiempos tiempos. El último de ellos ha tenido lugar en la localidad jienense de Lopera, donde varios perros eran mantenidos en condiciones lamentables en un criadero ilegal.
Cuatro personas, dos de ellas veterinarios colegiados, están siendo investigadas por la Guardia Civil tras detectar un supuesto criadero ilegal de perros en Lopera (Jaén) donde los animales se encontraban sin cumplir las más mínimas condiciones higiénicas y de salud. Este episodio se suma al terrible maltrato sufrido por un perro que ha sido acribillado en Granada.
De esta manera, el Seprona recibió hace tres meses una denuncia apuntando a un posible maltrato animal. La denunciante señalaba que había acogido hasta nueve ejemplares de perros en una condiciones higiénicas y de salud "deplorables", todos ellos procedentes de un supuesto criadero ilegal de perros. La mujer horrorizada se atrevió a denunciar el caso.
Criadero de perros
Posteriormente, fue la propia Guardia Civil la que constató la existencia de dicho criadero de perros, situado en el polígono industrial de Lopera (Jaén). En la inspección de las instalaciones, los agentes detectaron hasta 35 perros de más de tres meses, sin la correspondiente identificación.
Además en 48, tras el análisis de los pasaportes, se había realizado una pauta de vacunación incorrecta, mientras que el responsable de las instalaciones, carecía de la licencia de actividad, al no estar en posesión del correspondiente permiso expedido por el Ayuntamiento y con el que se certifica que se trata de una empresa apta para estas funciones.
Por otra parte, las instalaciones carecían de la correspondiente autorización y registro como núcleo zoológico y del registro de entrada y salida de animales. También se pudo constatar la venta de un total de 47 canes por un importe aproximado de 50.800 euros.
Responsables de la instalaciones
Es por ello que a los responsables de las instalaciones se les ha investigado como presuntos autores de un delito de falsedad documental, al localizar 20 perros, supuestamente identificados de forma incorrecta mediante los pasaportes que contenían el microchip en su jeringa.
A uno de ellos de los veterinarios se le acusa de un delito de falsedad documental por la presunta expedición de los 20 pasaportes, cuyo microchips asociados a los mismos no habían sido implantados en el animal. Al otro veterinario se le ha investigado por consignar la vacunación antirrábica y tratamiento contra el echinococcus, aunque, posteriormente, no se inoculó a los animales.
De las actuaciones, se han instruido las oportunas diligencias que ya han sido entregadas en el Juzgado Mixto número 1 de Andújar (Jaén). La Autoridad Judicial determinará ahora el futuro de los investigados.
