La madrugada del pasado 26 de mayo, varios individuos pertenecientes a un grupo criminal se desplazaron hasta la localidad de Vélez-Málaga para secuestrar a un joven, a quien metieron a la fuerza en un vehículo y trasladaron hasta Málaga posteriormente. La familia tuvo que abonar un importe de 10.000 euros para liberarlo y una vez conseguido pusieron estos hechos en conocimiento de la Policía Nacional.
Los agentes, tras ello, iniciaron una investigación que apunta a un posible negocio fallido dentro del tráfico de estupefacientes y por la que se ha logrado detener a un total de cuatro hombres.
Los presuntos autores habrían solicitado a los familiares del joven una recompensa para su liberación. Así, horas más tarde del cautiverio la víctima fue puesta a salvo, después de que varios miembros de su familia acudieran al lugar acordado por los secuestradores donde hicieron entrega de 10.000 euros, quedando pendiente por saldar otro pago del mismo montante económico, según ha informado la Policía Nacional en un comunicado.
El motivo del secuestro
Por estos hechos, y a raíz de la denuncia interpuesta, los agentes especializados del Grupo I de Crimen Organizado de Málaga junto con el Grupo de Estupefacientes de Vélez-Málaga iniciaron una investigación en el marco de la Operación Prisma.
Las primeras pesquisas realizadas por los investigadores determinaron que el secuestro estaba motivado en un negocio fallido de tráfico de drogas. Tras continuar con las gestiones, los agentes identificación a cuatro peligrosos hombres, de entre 27 y 29 años, siendo tres de ellos de origen marroquí y uno de ellos español, como responsables de los hechos investigados.
Finalmente, los agentes procedieron a la detención de los cuatro implicados en la ciudad de Málaga, arrestos practicados los días 28 de julio y 2 de agosto, como presuntos responsables de un delito de secuestro y pertenencia a grupo criminal. De los hechos conoce el Juzgado de Instrucción número 4 de Málaga que ha decretado el ingreso en prisión de tres de ellos.
