Los nuevos inventos de la industria del automóvil parecen estar destinados a una futura producción de coches eléctricos, pero todavía es muy pronto para decir que esta será una solución definitiva para la contaminación causada por el consumo de combustibles fósiles. En este sentido, la electrificación parece ser la solución más común en este sentido, pero hay otras opciones y una de ellas es el combustible sintético.
Como toda nueva medida, hay marcas que están de acuerdo, mientras que otras son más reticentes a hacer estos cambios tan drásticos. En este contexto, Mercedes-Benz es una de las marcas que ha abandonado este tipo de propuestas, pero otras como, Porsche, apuestan con decisión por este tipo de nuevos combustibles.
Este nuevo combustible, sobre el que está trabajando Porsche, permitirá que los coches con motor de combustión puedan continuar funcionando con normalidad durante muchos años más. Pese a que el estándar pase a ser el modelo eléctrico, los coches con motor de combustión podrán seguir siendo utilizados gracias al nuevo combustible sintético de la marca.
La clave de esto reside en que este nuevo combustible podría reducir hasta en un 85% las emisiones de partículas NOx y de CO2. Al parecer, no se alcanza el 100% de reducción, que si consiguen los coches eléctricos, pero Porsche asegura que esta reducción de la huella de carbono en la fabricación del vehículo y del combustible hace que este porcentaje se equilibre y sea totalmente neutro.
Este nuevo combustible permitirá que las personas que tengan un coche de la marca puedan usarlo durante muchos años. La compra de uno de estos coches supone una importante inversión, así que la compañía pretende seguir incentivando su compra para que no se queden inservibles a causa de la electrificación en unos años.
Otras marcas se oponen
La aparición de este combustible sintético también ha despertado cierto interés en Volkswagen, que también se encuentra investigando sobre un tipo de combustible basado en metano sintético. McClaren también esta realizando un estudio sobre el uso de combustible sintético que tenga un balance de CO2 neutro, mientras que Mazda también se ha sumado al carro de los combustibles sintéticos.
Justo en el lado contrario está Mercedes-Benz, que considera que es una pérdida de recursos el utilizar electricidad en producir este tipo de combustibles si se puede almacenar esa misma electricidad en una batería para obtener movimiento en el propio vehículo. Por esta razón, ha abandonado su estudio al respecto, y se centrará en la electrificación de sus vehículos y no en la producción de combustible sintético.
«El combustible sintético es más limpio»
«El combustible sintético es más limpio y no hay subproductos, cuando comencemos la producción completa esperamos una reducción en las emisiones de dióxido de carbono del 85%», afirmó Frank Walliser, vicepresidente de Porsche Motorsport y GT, en una reciente entrevista. Además, continúa que si se tienen en cuenta las emisiones del pozo a la rueda, los eléctricos se mueven en cifras similares a los vehículos térmicos alimentados por combustibles sintéticos.
En este sentido, Porsche no ve esta solución como un reemplazo para los vehículos eléctricos a batería; sino que creen que será un complemento adicional. «La movilidad eléctrica sigue siendo la máxima prioridad en Porsche. Los combustibles sintéticos son un complemento a la electrificación de Porsche, no un rival».
La Unión Europea está cercando cada vez más los motores de combustión interna, por lo que el cambio a otro tipo de formas de combustible es más que evidente. Sin embargo, parece que Porsche se resiste a electrificar algunos de los modelos más icónicos de su compañía; por lo que se adentrará en el combustible sintético para lograr un cierto equilibrio entre un modo de combustión y otro.
