La pareja de moda dentro del mundo de la política podría haber puesto punto y final a su relación. Pablo Iglesias e Irene Montero podrían haber roto su relación sentimental el pasado mes de marzo, pero no ha sido hasta ahora cuando 'El Cierre Digital' ha confirmado la noticia.
Según las informaciones procedentes de fuentes gubernamentales y del propio Podemos al citado medio, la pareja habría roto hace unos meses, concretamente en marzo, y habría puesto en venta el polémico chalé de Galapagar. Al parecer, Iglesias y Montero llevaban sufriendo una crisis sentimental importante desde hacía algunos meses, incluso desde antes de la salida de Pablo del Gobierno.
Después de cinco años de relación y tres hijos en común, el bache ha podido más que la pareja, que ha decidido emprender caminos opuestos por el bien de ambos. Por ello, la primera decisión ha sido la de vender el chalé de Galapagar por 660.00 euros, 45.000 euros más del precio que pagaron por ella hace tres años.
El conocido como "casoplón de Galapagar" en una parcela de 2.352 metros cuadrados había sido reformado por la pareja de Unidas Podemos, quienes acondicionaron el garaje y lo convirtieron en dormitorio. Además ampliaron el gimnasio e instalaron una barbacoa de piedra en el porche trasero.
La ruptura llegó antes que el abandono de Pablo Iglesias del Gobierno
Pablo Iglesias abandonó a mediados de marzo la vicepresidencia del Gobierno para ser candidato a la Comunidad de Madrid para frenar el avance de Isabel Díaz Ayuso. Tras la estrepitosa derrota, Iglesias decidió dar un paso al lado y abandonar la política. Una decisión que habría venido después de la supuesta ruptura con Irene Montero.
Al poco, Pablo Iglesias sorprendía a todos sin su particular coleta y luciendo un corte de pelo que parecía marcar un antes y un después en su trayectoria política. Desde entonces, se ha mantenido al margen de la política y en silencio, no sorprendiendo hasta este pasado 6 de julio en una conferencia para la Universidad Complutense de Madrid.
Por su parte, Irene Montero si ha estado más activa en el foco mediático, inmersa en la elaboración de la Ley Trans y ajena al ruido que se movía a su alrededor en cuanto a temas personales. La ministra ha recibido en estos meses numerosas críticas por su posicionamiento en casos mediáticos como el de Rocío Carrasco, a quién apoyó tras emitirse el primer capítulo de la docuserie.
Ahora parece que el 'adiós' de Iglesias de la política, su corte de pelo y su hermético silencio podrían tener una explicación. Sin embargo, la ruptura no se ha hecho aún oficial por parte de la pareja, dado que consideran que su relación sentimental no es de trascendencia pública.
