viernes. 26.04.2024
Lola Índigo en The Dancer
Lola Índigo en The Dancer

Lola Índigo se enfrentó a una de sus galas más difíciles en el programa The Dancer. En este último programa se cerraron los equipos de los tres capitanes: Miguel Ángel MuñozLola Índigo y Rafa Méndez. Ahora pasarán a la siguiente fase del formato, donde tendrán que competir entre ellos, y demostrar quien es el mejor bailarín. 

Historia de María y Rubén en The Dancer

Pero como siempre, algo pasa durante el programa, y las historias que cuentan los participantes a veces llegan a los capitanes de una forma especial. Este fue el caso de María, una bailarina que sufrió un Trastorno de Conducta Alimentaria (TCA) a causa del baile, y Lola Índigo se sintió más identificada de lo normal. 

Al parecer, María comenzó con su pareja de baile Rubén a los 15 años, pero esto no salió bien debido a la diferencia física entre ambos: ella era alta y grande, mientras Rubén era más delgado y bajo. La pareja de baile intentó solucionar esta situación con dietas y ejercicios, pero finalmente María salió bastante perjudicada.

Desde entonces, la bailarina empezó a tener problemas con la comida y con el espejo, ya que se empezó a despreciar a sí misma. Esto la llevó a no poder competir, ya que sus piernas dejaron de moverse a causa del cansancio de no tener nutrientes en el cuerpo. Pero su pareja de baile, fue consciente de lo que estaba viviendo María y decidieron pedir ayuda hasta que le diagnosticaron anorexia. 

Tras dos años de duros esfuerzos y de recuperarse de esta enfermedad alimentaria, la pareja de baile formada por María y Rubén llegó a The Dancer a comerse el escenario, y a demostrar todo lo que valen. La pareja apostó por bailar Crazy de Gnarls Barkley, y pudimos ver como los capitanes se emocionaron con su historia. 

Lola Índigo se siente identificada

Después de su actuación, Lola Índigo les agradeció que contaran su historia: "Cada vez hay más diversidad, pero mucha gente al mando de muchas cosas tiene que aprender que a los shows va gente muy distinta y con físicos muy diferentes". 

Asimismo, se atrevió a contar también su experiencia en el mundo del baile respecto al físico: "A mí me han tirado de castings por estar gorda, pero al final aprendes a ser tú. Tienes mucho amor a tu alrededor y gracias a ti que compartes la historia, la gente que está en casa se sentirá acompañada", confesó Lola Índigo. 

Problemas alimenticios 

En este sentido, la artista granadina ya reconoció en otro programa de The Dancer, que ella también sufrió un Trastorno de Conducta Alimentaria. "Yo era muy gordita y todos los niños me decían que cómo iba a ser bailarina. Sufrí mucho con eso, pero quería demostrar que podía hacer lo que me diera la gana. Fue el baile el que me ayudó a recuperar la autoestima", contó la cantante en el tercer programa.

Aunque sigue habiendo comentarios sobre su aspecto y su físico, la granadina admitió que ya no le afectan. "Tengo espejos en casa y lo veo. Pero ya no me raya. Me siento bien y soy más feliz que antes, cuando tenía que estar pesando la comida”, comentó en una entrevista. 

También confesó que esa presión por su aspecto físico se ha transformado en responsabilidad porque “si hay una niña que se puede identificar con mi físico, siento que estoy haciendo algo bien. Yo soy una chica normal que hace deporte y que come bien”.

Ahora, Lola Índigo se encuentra en el mejor momento de su vida, tanto profesional como personal y ha conseguido superarse a sí misma en muchísimos aspectos. Atrás queda la Mimi insegura de la que ella misma habla y se ha convertido en todo un referente para las nuevas generaciones.

Lola Índigo: "Me han tirado de castings por estar gorda"