Las operaciones contra la droga se suceden en Andalucía, especialmente en la provincia de Huelva, donde las autoridades están asestando importantes golpes a grupos organizados en las últimas fechas. En el último de ellos se han intervenido hasta 6.000 kilos de hachís.
De esta manera, la Policía Nacional, en colaboración estrecha con otros colectivos nacionales e internacionales, ha intervenido en aguas internacionales del Atlántico a 130 millas de la costa de Huelva, unos 6.000 kilos de hachís y han detenido a los tres tripulantes del narco-velero. Se trata del segundo golpe de estas características tras el asestado hace unos días con 27 detenidos en Huelva.
Hay que aclarar que esta operación supone un "golpe policial a las organizaciones criminales del Este, líderes en el tráfico de drogas por vía marítima". Además se han incautado de un dron, cámaras de seguridad o un detector de radiofrecuencia.
Velero usado para el narcotráfico
Todo se inició a principios de 2021 tras confirmarse las informaciones de que "uno de los grupos criminales más activos en España" se disponía a adquirir un velero "para su uso en el narcotráfico". Seguidamente, se identificó el velero y se coordinó una actuación policial.
La embarcación, de nombre BIBI y presunto pabellón maltés, se desplazó en febrero del presente año a Italia, desde donde se trasladó en marzo hasta España, estableciéndose en las costas levantinas como punto logístico.
Desde España llegaron a Marruecos donde cargaron la droga con la intención de retornar a nuestro país e introducir el estupefaciente en Europa a través del sur de la península. Finalmente y gracias al compromiso internacional de todas las unidades intervinientes, la embarcación fue interceptada en aguas internacionales.
Patrón de la embarcación
Los tres tripulantes, entre los que se encontraba el patrón de la embarcación, fueron arrestados por las autoridades. Se trata de un capitán con años de experiencia y con elevados conocimientos marítimos, quien ya había sido detenido previamente en similares circunstancias.
Finalmente, hay que añadir que el registro del barco se saldó con la aprehensión de unos 6.000 kilos de hachís, así como un dron que utilizaban para detectar seguimientos por parte de las autoridades policiales, cámaras de seguridad, o un detector de radiofrecuencia.
