Es el pan nuestro de cada día desgraciadamente, pero nunca terminará de sorprender. En este caso ha ocurrido en la localidad sevillana de San José de la Rinconada donde dos hombres acumulaban hasta ocho órdenes de ingreso
En este sentido, agentes de la Guardia Civil de La Rinconada (Sevilla), en el marco de la operación 'Buhero', han detenido a dos de los supuestos delincuentes "más activos" tanto en Rinconada como en San José de la Rinconada. Los robos eran su especialidad pese a tener órdenes de ingreso en prisión.
Hay que señalar que uno de ellos posee un total de 29 detenciones y está implicado en 62 hechos delictivos, y otro cuenta con 19 arrestos anteriores y está implicado en 37 hechos delictivos. Los dos acumulaban más de ocho órdenes de detención e ingreso en prisión.
Grandes medidas de seguridad
Por otra parte, la Guardia Civil constató que los detenidos tomaban "grandes medidas de seguridad" a la hora de llevar a cabo las acciones, "extremando la precaución para no ser detectados por los agentes e incluso utilizando a menores para estar pendientes de los domicilios.
Hay que aclarar que todos los delitos cometidos han sido contra el patrimonio, sobre todo eran robos con fuerza en el interior de viviendas, comercios e interior de vehículos. Ya se ha decretado una nueva orden de ingreso en la cárcel.
Detenido transportando droga en Morón
Asimismo, agentes de la Policía Nacional han detenido a un varón de 42 años de edad en Morón de la Frontera (Sevilla) por un supuesto delito contra la salud pública. El arrestado es vecino de La Línea de la Concepción (Cádiz), y fue interceptado por los agentes en la carretera SE-7204 transportando más de 21 kilogramos de marihuana a altas horas de la madrugada.
Los agentes interceptaron un vehículo con dos varones que, al percatarse de la presencia policial, realizaron "maniobras esquivas" y "conductas nerviosas", por lo que recibieron el alto. Los agentes se percataron de un fuerte olor a marihuana, si bien no existía dicha sustancia en el momento de la intervención. A pesar de ello, los policías extremaron precauciones pensando que podía tratarse de un "vehículo lanzadera" de otro posible transporte de sustancias estupefacientes, "como finalmente sucedió, pocos minutos después".
