viernes. 26.04.2024
6 Salida a hombros
En San Fernando Ginés Marín, Curro Díaz y David Galván salen a hombros

El 25 de septiembre se ha celebrado en San Fernando (Cádiz) una corrida extraordinaria en conmemoración del 150º aniversario de la plaza de toros y del Centenario del nacimiento del maestro Rafael Ortega, organizada por la empresa de Curro Escarcena y retransmitida por Canal Sur TV. Con tiempo soleado, se dio una media entrada del aforo total. Preside Jacinto Cano. Ameniza la Banda de Música del Nazareno, dirigida por Juan Luis Álvarez.

Se sueltan seis toros de Herederos de José Luis Osborne, bien presentados y de buen juego en general, con alguna dificultad. En el arrastre, el segundo toro y el sexto tienen palmitas; el quinto es pitado.

  • Curro Díaz, gran estocada de efecto fulminante; una oreja con fuerte petición de la segunda. Entera desprendida, con un poco de vómito; una oreja.
  • David Galván, estocada desprendida de efecto fulminante; una oreja.  Pinchazo y estocada honda de efecto rápido; una oreja.
  • Ginés Marín, estocada entera arriba; una oreja con fuerte petición de la segunda. Entera desprendida; dos orejas.

Incidencias: al término del paseíllo se guarda un minuto de silencio y se interpreta el Himno Nacional; después el empresario, en presencia de Ruiz Miguel, entrega una placa de recuerdo y un ramo de flores a la viuda de Rafael Ortega. Entre las cuadrillas, se desmonteran Víctor Nieto (de la cuadrilla de David Galván) y Rafael Viotti (de la cuadrilla de Ginés Marín). Los tres matadores salen a hombros.


Después de tanto tiempo, por la pandemia dichosa, sin abrirse a los espectáculos taurinos, la plaza de La Isla cambia de manos gestoras y el nuevo empresario ha tenido la feliz idea de homenajear al maestro Rafael Ortega (rey de espadas y mucho más), que habría cumplido hoy cien años. Su viuda, Pepita Camacho, ha sido la representante del homenajeado y a ella ha ido la materialización del homenaje. Lo extraordinario de la corrida de ahora también viene del siglo y medio que cumple el coso; que dure otro siglo y medio.

1 Homenaje a Rafael OrtegaHomenaje a Rafael Ortega

Curro Díaz

Curro Díaz, de azul marino y oro, a su primero, ensabanado mosqueado según la típica capa de Osborne, le da una tanda breve de tanteo pero el animal no pone mucho interés y parece que tiene algún tipo de lesión en un remo delantero. Con el caballo, al primer envite descabalga al picador pero luego lo llevan por segunda vez para picarle fuerte, con lo que  sale del peto sintiendo el castigo. Hay buenos pares de Óscar Castellano.

Tras brindis al público, la faena tiene un bello inicio por alto, rematado con trinchera y aplaudido; una tanda a media altura despierta el entusiasmo del público, seguida de dos tandas más con mucho sabor; al natural hay buen toreo, muy templado y con parsimonia, recreándose el torero y nuevamente premiada con aplausos; luego cita al toro que se viene de lejos para tanda con la derecha a media altura, rematada con un cambio de manos por bajo y premiada por el público; finalmente, la tanda de preparación se hace con los ayudados por bajo característicos del linarense.

2 Curro DíazCurro Díaz

A su segundo, colorado ojo de perdiz que sale corretón y un tanto distraído, lo está lanceando y en un determinado momento se le cuela por el pitón derecho, cosa que vuelve a repetir con un subalterno, como si se debiera a un defecto en el ojo derecho; al rematar la tanda, Curro cae al suelo sin consecuencias, pero se ha debido al golpe en la pierna que sufrió cuando la colada y por momentos se resiente.

En el caballo tiene una pelea aceptable y la puya es moderada, pero se sigue venciendo cuando lo sacan los subalternos e incluso llega a caer. Juan Carlos García deja un buen par y el toro vuelve a caer.

La faena inicia con tanda a media altura, para cuidar al animal, pero muy templada y aplaudida; sigue otra tanda, corta, tirando de él, que está yéndose a tablas; con la izquierda sigue la muleta a media altura y el bicho sale de cada pase con la cara levantada, mirando para todos lados; a diestra de nuevo, al iniciar cae todo lo ancho que es, lo que obliga a tanda nuevamente cuidadosa pero pinturera; por el pitón izquierdo salen los pases de uno en uno y el toro va y viene sin entusiasmo, protestando cuanto puede, acortando el viaje y Curro cambia de mano pasando por la cara; lo prepara con ayudados por bajo y por la cara.

David Galván

David Galván, de gris perla y oro, en su primero, hecho a modo en la línea de Osborne, le presenta el capote en tablas sin que el animal ponga mucho de su parte. La puya es bien puesta y de duración ajustada. Brinda al público e inicia la faena a pies juntos y aguanta una colada, el toro se resiste y le sigue aguantando hasta que remata esta tanda, bella y aplaudida; sigue en tablas con la derecha y el burel no presta mucha colaboración.

Luego se va a otro lugar de las tablas, donde David aguanta una nueva colada y luego el toro se tira al pecho pero le sigue aguantando; con la izquierda se lo pone difícil y, otra vez a diestra, siempre en tablas se faja con él; sigue insistiendo David, porque de ahí el animal no sale, teniendo que aguantar las protestas continuas e incluso varios tornillazos recibidos estoicamente; de nuevo con la izquierda sigue insistiendo en tablas, exponiendo todo el torero porque el toro no da ninguna colaboración, solamente dispuesto a hacer carne, finaliza con un desplante. El tiempo entre la estocada y la muerte del toro no ha llegado ni a los ocho segundos.

3 David GalvánDavid Galván

A su segundo, bien hecho y colorado chorreado, lo recibe en tablas y el toro no pone mucho entusiasmo, retoma el lanceo avanzando a los medios y remata con una media. La puya es mal puesta, corregida varias veces. Es bueno el único par de Joselito Rus.

Al tomar la muleta empieza un cante por bulerías en el tendido a cargo de Charo Castilla, “a capella”, que dura casi la faena entera, que la desarrolla David en tablas con un toro que tampoco presta su colaboración; se va a las tablas del lado contrario, huyendo de la muleta, y allí le persigue el cañaílla, que intenta sujetarlo pero no puede; al contrario, es arrollado, vuelve y es arrollado por segunda vez; está completamente rajado, es un manso de libro y con mucho peligro. La oreja cae más bien como un premio al esfuerzo.

Ginés Marín

Ginés Marín, de azul ágata y oro, en su primero, colorado ojo de perdiz que sale con patas y remata, aplica un saludo iniciado por cordobinas y que sigue por verónicas muy reposadas mientras avanza a los medios para dejar el toro con una media muy elegante. La puya es bien cogida y breve, siendo aplaudida y conforme el picador (que es el padre) se va siguen las palmitas. El quite se desarrolla por chicuelinas de manos bajas, que gustan. Brinda al público pero voltea la motera con la espada, en un feo gesto impropio de un torero serio como Ginés.

Recibe en tablas con ayudados y saca al toro a los medios; ahí sigue toreo en redondo; luego otra y el animal no muestra la disposición que parecía tener cuando recién salido, pero al final de la tanda es aplaudido el torero; por la izquierda saca cosas buenas a base de ir tirando del toro, con repercusión en los tendidos, viene luego el toreo de cercanías, arrimándose mucho, acortando distancias y con los consabidos circulares. La última tanda es por bernadinas, aplaudidas sí pero con un toro que ha ido a menos.

4 Ginés MarínGinés Marín

A su segundo, precioso de estampa, negro bragado, bien encornado pero muy flojo de remos, lo recibe con un buen ramillete de verónicas, de tablas a medios, lanceando con temple y cerrando con media. El toro acude presto al caballo donde recibe una puya buena y en sus justos términos, puya aplaudida. Ginés lo quita con una media y pide el cambio de tercio. Vemos un buen par de Antonio Manuel Punta.

5 Ginés MarínGinés Marín

La faena empieza por doblones y por alto pero el toro parece que va perdiendo las fuerzas que tenía de salida; hay buena tanda con la derecha, en redondo, en la boca de riego, poniendo todo el torero y aplaudida; sigue el toreo ligado, refrendado con aplausos; por el pitón izquierdo se comporta como un marrajo, negándose a colaborar y pegando tornillazos de todos los colores; por el pitón derecho, otra vez de nuevo, va mucho mejor y sale una tanda breve pero intensa, lo más interesante de la tarde; por ahí sigue una nueva, sacando los pases de uno en uno, con mucho esfuerzo y pasando finalmente al toreo de cercanías.

6 Salida a hombrosSalida a hombros

Los tres espadas a hombros es siempre una imagen reconfortante. La gente lo disfruta y más en San Fernando, donde la plaza, por sus hechuras invita a echarse al ruedo y, en efecto, el público mayor y menor se lanza a acompañar a los triunfadores, queriendo sentir lo mismo que los toreros cuando pisan la arena, queriendo tocar a los héroes. El que escribe también se lanza a la arena.

Toros: En San Fernando Ginés Marín, Curro Díaz y David Galván salen a hombros