Morera y Meni, valor de marca

O cómo la gracia natural revaloriza el arte cuartetero

Morera y Carlos Meni desprenden simpatía a raudales. Poseen el don de la gracia natural. Que es algo así como la sintomatología del ángel (a veces escrito sin ele). Como cuarteteros no tienen parangón. Son la revisión moderna de Pepe el Peña y Juan el Masa. Con un lenguaje del siglo XXI aliñado también del argot de la calle. Desprenden la espontánea naturalidad del humorista que trabaja a destajo.

En la pasada edición del COAC 2018 dieron un pelotazo que igualmente también puede leerse como bastinazo. El ‘Trinchera’ puso en la cima de la admiración a “don Antonio” Martínez Ares. Aquel Equipo A minúscula dio mucho de sí. Tanto que incluso esculpieron personajes ya míticos para la historia del Carnaval. Sus pases en el concurso se han contabilizado por miles de visionados en Youtube.

Superar aquel tipo, aquellos tipos, parecía misión imposible. Cuando un éxito sobreviene de manera rotunda, abismal, parece que ya todo cuanto suceda a continuación estará abocado al más estrepitoso fracaso. Sin embargo han vuelto a estar a la altura. Y de nuevo han hecho reír a mandíbula batiente. Vestidos de bomberos un tanto surrealistas. El valor adicional de Morera y Meni son ellos mismos. Valor de ley. Valor de marca.